7 Técnicas Para Acabar Con El Estrés y Cuidar El Cuerpo y La Mente

Controlar el estrés es difícil, pero no imposible. Algunos expertos de renombre nos explican en detalle cómo levantar el ánimo, mantener la calma y eliminar la energía negativa.

Ve al gimnasio, no al sofá

Cuando tienes estrés, tu cuerpo libera cortisol, una hormona que puede hacer que no te deshagas de la grasa abdominal: “Es un proceso natural que no controlamos, pero sí podemos evitar que se produzca demasiado cortisol”, explica la reputada experta en fitness Kathy Kaehler. “Busca una forma de desconectar durante los días más duros. Pásate por el gimnasio o por el parque antes de volver a casa. Saltar a la comba un par de minutos es una forma rápida de liberar la energía acumulada. Después, puedes dar un paseo rápido, que va genial para tonificar las piernas y ayuda desestresarse gracias al cambio de ritmo”, añade.

Respira hondo

“Si no puedes levantarte del ordenador, respirar profundamente es una buena forma de reducir el estrés”, comenta Kaehler. Esta técnica evita que aguantes la respiración y que hagas respiraciones más cortas, lo que priva de oxígeno al cerebro: “Ponte una mano en el pecho y la otra en el ombligo. Respira hondo y nota cómo se expande el abdomen al soltar el aire. No hace falta que cuentes los segundos; para relajarte por completo, lo importante es inspirar y espirar la mayor cantidad de aire posible”.

La música y la naturaleza calman el espíritu

La doctora Kathleen Hall, directora ejecutiva del Stress Institute de Atlanta, afirma que es importante encontrar soluciones rápidas y prácticas para superar situaciones estresantes. “Escuchar sonidos de la naturaleza, como el canto de un pájaro, el arrullo de las palomas, el crepitar del fuego o el sonido de la lluvia, puede producir un efecto increíblemente relajante (existen estupendas aplicaciones para móvil con esa función). El cerebro reacciona positivamente a este tipo de sonidos y reduce de inmediato los niveles de estrés”, explica Kathleen.

Come menos alimentos dulces

“Las comidas azucaradas disparan los niveles de azúcar en sangre. El ritmo cardiaco se acelera para procesar lo que has comido, lo que hace que te sientas lleno de energía”, comenta Simone Laubscher, nutricionista y cofundadora de Welleco. Una vez que se disipa esa sensación, tus niveles de energía bajan en picado: “Es un círculo vicioso de subidas y bajadas que hace que siempre tengas antojo de azúcar para sentir ese subidón. Limítate a dos o tres cucharaditas al día (una cucharadita equivale a unos cinco gramos) y nunca añadas azúcar a la comida”, advierte.

Consume proteínas, pero sin sustancias perjudiciales

Según Laubscher, incluso las personas más cuidadosas con su salud pueden sentir fatiga si sus dietas son demasiado químicas: “Hay gente que deja de comer carbohidratos para adelgazar, pero no se preocupa por la calidad de proteínas que ingiere. Es posible que consuman carne procesada y llena de hormonas y sustancias nocivas, lo que puede explicar la sensación de hinchazón y la irritabilidad. Y aunque la carne orgánica es estupenda, si buscas algo más económico puedes optar por los huevos o el atún”.

Deja tranquilas a tus glándulas suprarrenales

“Las glándulas suprarrenales (cuya función es segregar adrenalina para ayudar al cuerpo a responder al estrés) odian el azúcar. Toma alimentos que te relajen y que sean ricos en ácidos grasos omega-3, como el aguacate o el aceite de lino”, explica Laubscher. Si bebes zumo de arándanos, cámbialo por zumo en polvo disuelto en agua para ayudar a tus glándulas suprarrenales; a diferencia de la mayoría de zumos de frutas, no contiene azúcares añadidos.

Si sigues estos consejos, podrás superar cualquier reto, ya sea mental o físico. Y si quieres compartir algún truco con nostros, cuéntanoslo en Facebook @Slendertone España.

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